¿Cómo escoger el tipo de cuenta de inversión?

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Fotografía: Pexels.

Una persona deseosa de una cuenta de inversión necesita pleno conocimiento de las diferentes modalidades de este instrumento en el mercado financiero, además de nociones acerca de tolerancia al riesgo.

Claudia Martínez y Gioconda Bolinches / 16 de diciembre de 2019


Abrir una cuenta de inversión requiere considerar diversas variables; especialmente, la jurisdicción donde operará, la firma de asesoría, los costos operativos asociados y el tipo idóneo de cuenta según criterios de beneficios y responsabilidades. Con independencia de la estructura seleccionada, la tenencia de una cuenta de inversión implica, en primer lugar, establecer un contrato entre las partes (cliente, casa de bolsa o asesor financiero) que explique los derechos y las obligaciones de los firmantes y especifique los cargos causados por los servicios prestados.

La estructura general de la mayoría de los contratos contiene aspectos tales como capacidad legal de los suscritos, información laboral y datos asociados con un programa de identificación del cliente (CIP, por sus siglas en inglés): nombre, fecha de nacimiento, dirección física, número de identificación, ciudadanía e información financiera. La cuenta individual es el tipo de cuenta más usado en el mercado financiero. Posee un único beneficiario; por lo general, una persona natural cuyas inversiones las maneja un asesor a cambio de una cuota (fee) anual preestablecida.

Antes de hacer recomendaciones el asesor presenta por escrito, en un documento conocido como declaración de política de inversión (IPS, por sus siglas en inglés), los objetivos específicos y la estrategia de inversión convenida con el asesorado. Además, añade el perfil de tolerancia de riesgo que manifiesta el cliente. Se estila que el asesor revise periódicamente el perfil del cliente para determinar cambios en la cartera de inversión en su carácter fiduciario. En cuanto al aspecto legal, basta con precisar que el titular de la cuenta es la única persona que puede controlar las inversiones o requerir distribuciones de efectivo o activos de la cuenta.

La cuenta conjunta es otra modalidad popular en el mercado. Se caracteriza por tener dos o más titulares, cada uno con control sobre la cuenta. Hay dos tipos de cuentas conjuntas: titulares en común (TIC, por sus siglas en inglés) y titulares conjuntos con derechos de supervivencia (JTWROS, por sus siglas en inglés). Tras definir el tipo de cuenta conjunta, los titulares firman las planillas de apertura de cuenta. Puede haber firmas conjuntas o indistintas, según quede especificado en el acuerdo de cuentas conjuntas (joint agreement).

La cuenta TIC se caracteriza porque puede ser dividida de forma desigual. Cuando algún titular fallece, la porción del difunto pasa a revisión del Estado para confirmar si le corresponde pagar impuestos o no, sin pasar a ser parte del caudal del sobreviviente. La porción de los activos atesorados será distribuida según las instrucciones del difunto (sucesión). Su contrapunto es la cuenta JTWROS; pues, en caso de fallecimiento (o declaración judicial de incompetencia) de una de las partes, se estipula la transferencia de activos a los titulares sobrevivientes, que gozan de los mismos derechos (tanto al cobro en efectivo como al manejo de los activos financieros de la cuenta).

Existe la opción de la cuenta de transferencia en caso de muerte (TOD, por sus siglas en inglés): ideal para quienes deseen que, al momento de su muerte, sus activos se asignen directamente a beneficiarios previamente determinados, y evitar así el probatorio de los herederos. Una cuenta TOD no evita el potencial pago del impuesto sucesoral, que puede ir desde cero a cuarenta por ciento de acuerdo con los activos en tenencia y el monto total. El titular de la cuenta es la única persona con derechos de propiedad, y mantiene en todo momento el derecho de cambiar la identidad y el número de los beneficiarios, o modificar el modo de distribución de los activos. Los únicos tipos de cuentas que pueden ser abiertos con una TOD son individuales o JTWROS.

Una persona, además de interesarse en los tipos de activos que integrarán su cartera de inversión, necesita conocer con detalle las estructuras de participación y distribución de las diferentes modalidades de cuentas de inversión. Luego sus asesores financieros plasmarán los detalles en el correspondiente IPS.


Claudia Martínez, asesora financiera de Kapital Consultores. Gioconda Bolinches, representante de Portfolio Resources Group y consultora externa de Lifeinvest Asset Management.