La opción de venta de la Reserva Federal

746
Allan Greenspan, expresidente de la Reserva Federal de Estados Unidos.

Allan Greenspan implantó la política de bajar la tasa de fondos federales cada vez que el mercado accionario mostraba caídas cercanas al veinte por ciento. Es comprensible que los actores del mercado financiero quieran que la FED suscriba una opción parecida; pero está todavía lejos de concretarse, si es que sucede.


La teoría de opciones permite no solamente valorar productos derivados, lo que no es poca cosa, sino también explicar el impacto de algunas decisiones de organismos públicos y empresas privadas. Al establecer símiles entre decisiones gerenciales y opciones de compra y venta, los académicos pueden analizar más claramente los impactos y costos de tales decisiones.

La opción de venta de Greenspan (Greenspan Put, como se conoce en inglés) es el nombre de una política implantada por Allan Greenspan —presidente de la Reserva Federal (FED) entre 1987 y 2006—, que consistía en bajar la tasa de fondos federales cada vez que el mercado accionario mostraba caídas cercanas al veinte por ciento. La reducción del costo del dinero ayudaba a revertir la caída bursátil y funcionaba como una póliza de seguro contra el siniestro de la caída del precio de las acciones, tal como lo hace una opción de venta (put).

Al darle soporte al mercado accionario, Greenspan trataba de evitar que la economía estadounidense entrara en crisis. Debido a la ocurrencia de hechos tales como la caída de las puntocom, la crisis inmobiliaria de 2007 y la pandemia de la covid, muchos actores del mercado financiero esperan que, en situaciones de incertidumbre económica, la FED salga a rescatarlos con la Greenspan Put. Tal expectativa ha hecho que la tolerancia al riesgo se haya vuelto más generalizada.

En la actualidad hay dos visiones encontradas sobre el futuro cercano de la economía estadounidense y su impacto en los mercados financieros. Una de ellas es la de los técnicos de la FED y otra la de los gestores de carteras de inversión.

Los técnicos de la FED esperan seguir aumentando la tasa de fondos federales, hasta que haya evidencias claras de que la inflación está en vías de alcanzar la meta de dos por ciento, y están dispuestos a pagar el precio de una recesión si es necesario. La tasa de redescuento empezaría a bajar nuevamente cuando la FED considere que el fenómeno inflacionario haya dado señales claras de estar controlado. De imponerse esta visión, el mercado accionario podría mantenerse deprimido por tiempo indefinido.

Los gerentes de inversión, aunque no tienen una visión monolítica sobre la evolución de la inflación, tienden a comprar la idea de que la FED podría dejar de subir la tasa de los fondos federales en los próximos meses, y comenzar a bajarla a finales de 2023. Si este fuese el caso, un mercado accionario alcista podría comenzar cuando las señales de una reducción de tasas fuesen claras. Esta expectativa ha alimentado un repunte, en lo que va de 2023, de los activos financieros más riesgosos y especulativos.

Una reducción de la tasa de los fondos federales en un futuro próximo luce muy prematura, sobre todo si se considera que la inflación se mantiene muy por encima de cualquier objetivo razonable. Es comprensible que los actores del mercado financiero quieran que la FED cambie de rumbo y suscriba otra opción put. Gran parte del negocio del sector financiero de las dos últimas décadas se ha basado en una abundante oferta de fondos a muy bajos costos.

La credibilidad del banco central estadounidense está en juego. Su retraso en reconocer que la inflación no es un fenómeno transitorio no le da oportunidad para cometer un segundo error de juicio.

Nadie quiere una recesión. Pero permitir que la inflación vuelva a repuntar, debido a una apresurada reducción de la tasa de fondos federales, podría causar daños inconmensurables a la economía estadounidense, y al mundo en general. La opción de venta de la FED está todavía lejos de concretarse, si es que sucede.


Carlos Jaramillo, director académico del IESA.

Este artículo se publica en alianza con Arca Análisis Económico.

Suscríbase aquí al boletín de novedades de Debates IESA.