Final de temporada

1373
Fotografía: Ballardinix / Pixabay.

El segundo semestre de 2019 podría terminar con un mercado accionario caro para entrar; pero, si aún se está dentro, sin grandes incentivos para salir.

Carlos Jaramillo / 6 de julio de 2019


 

A todo efecto práctico, junio de 2019 terminó el pasado viernes 29. Y lo hizo como el final de temporada de una serie de streaming que espera continuar el siguiente año. El G-20 se reunió en Osaka y los presidentes Xi y Trump tuvieron la oportunidad de limar asperezas en el corto plazo, por lo que continuarán las conversaciones sobre el intercambio comercial entre los países que representan.

El S&P 500 tuvo el mejor junio desde 1955: un incremento de 6,9 por ciento, para lograr un acumulado semestral de 17 por ciento que lo coloca en la mejor alza del primer semestre del año desde 1997. Sin embargo, mientras que el mercado accionario estadounidense refleja en sus precios pronósticos de un tibio crecimiento económico, pero crecimiento al fin, el mercado de bonos oye los cantos de las valquirias de la recesión. Con una Reserva Federal que duda en recortar o no las tasas de redescuento, ya los créditos de la producción de este capítulo se deslizan por la pantalla: señalan el final del semestre y el anhelo de la llegada de la nueva temporada.

¿Cómo será el segundo semestre de 2019? ¿Qué harán los precandidatos demócratas a las elecciones presidenciales de noviembre de 2020 en Estados Unidos? ¿Qué harán los chinos? ¿Qué pasará con el brexit? Material abunda para escribir el siguiente capítulo, veamos entonces algunas posibles escenas.

Las ofertas públicas iniciales (IPO, por sus siglas en inglés) continuarán dando la hora en el segundo semestre del año, por lo que en 2019 pudiera alcanzarse un nuevo registro histórico de colocaciones. La cantidad podría superar los 90.000 millones de dólares del año 2014.

CB Insight, una plataforma tecnológica que ofrece servicios de procesamiento de datos para tomar decisiones en el mundo del capital de riesgo, informa que al menos 362 compañías de capital privado, con capitalizaciones superiores a mil millones de dólares, muchas de ellas producto de iniciativas desarrolladas en la última década, tarde o temprano harán su debut en bolsa. Como existe una clara correlación entre el número de IPO y el desempeño del mercado accionario, las nuevas emisiones en lo que resta de 2019 auguran un mercado en alza.

Las negociaciones comerciales con China continuarán por un sendero tortuoso, que dependerá en buena medida del avance en la contienda electoral en Estados Unidos. Los integrantes del mundo político en Washington coinciden en la necesidad de controlar la expansión china, particularmente vigilando las relaciones de las empresas tecnológicas. En consecuencia, la segunda mitad de 2019 estará llena de noticias de avances y retrocesos en el dialogo entre las dos economías más importantes del planeta. Y este tema está muy lejos de llegar a su final.

Todos los ojos están puestos en el conservador Boris Johnson, el candidato con más oportunidad de ser electo primer ministro británico, y se espera que tenga suficiente capital político para destrancar el juego: salir de la Unión Europea con o sin acuerdo, pero finalmente salir. Según los expertos, ya el mercado accionario refleja —en los precios de los activos británicos y la libra— el escenario más astringente: salida sin acuerdo. Una vez ejecutada la medida podrían ocurrir subidas de precios de los activos excesivamente castigados por la incertidumbre. Al salir de la Unión Europea, el Reino Unido queda a merced de los tratados de la Organización Mundial del Comercio, que ha sufrido duros golpes del gobierno de Trump, y, en un mundo que muta de la multipolaridad a la transacción dentro de bloques de influencias, tendrá que construir el suyo lejos de sus vecinos continentales.

Aun con todas las nubes en el horizonte, entre las posibles reducciones de tasas de la Reserva Federal, la propensión del Banco Central Europeo a inyectar dinero barato y el modesto crecimiento de la economía estadounidense, el capítulo del segundo semestre de 2019 podría terminar con un S&P 500 ligeramente por encima de los niveles actuales. Un mercado accionario caro para entrar; pero, si aún se está dentro, sin grandes incentivos para salir.


Carlos Jaramillo, director académico del IESA.